Imagen 1 de 1
Imagen 1 de 1
Imagen 1 de 1
Imagen 1 de 1
El cuadro refleja el manso transcurrir de un río entre los árboles. Un remanso de paz con aguas que aparecen tranquilas y reflejan tonos dorados y verdosos como de luz filtrada al atardecer.
Un rio que es un meandro, metáfora de la vida misma que siempre presenta recovecos.
Una pintura que tanto en su composición y colorido destila tranquilidad y puede convertirse así en un imprescindible para quien quiera disfrutar de esa naturaleza calma en el interior de su vivienda.
El cuadro refleja el manso transcurrir de un río entre los árboles. Un remanso de paz con aguas que aparecen tranquilas y reflejan tonos dorados y verdosos como de luz filtrada al atardecer.
Un rio que es un meandro, metáfora de la vida misma que siempre presenta recovecos.
Una pintura que tanto en su composición y colorido destila tranquilidad y puede convertirse así en un imprescindible para quien quiera disfrutar de esa naturaleza calma en el interior de su vivienda.